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En verano es frecuente que muchas personas elijan ciudades costeras para pasar sus vacaciones y disfrutar del sol y la playa. Sin embargo, aquellos que pueden disfrutar del mar todo el año, muchas veces buscan todo lo contrario y huir de las playas masificadas. Afortunadamente, España es un país muy rico en destinos turísticos, tanto de costa como de interior, y siempre tenemos la posibilidad de elegir la modalidad de vacaciones que más nos interese en cada momento.
En este sentido, la provincia de Lugo es un excelente destino para poder escapar del bullicio que caracteriza a las ciudades costeras en verano y además disfrutar de un clima mucho más suave, con noches más frescas. Una región que ofrece cultura, tradición y gastronomía, y en la que nunca hay tiempo para aburrirse. Por eso, si estás buscando un destino para hacer turismo de interior, Lugo es una excelente opción.
A continuación, te mostramos una de las mejores rutas por la zona para que puedas aprovechar cada minuto y conocer en profundidad una de las provincias más bellas del norte de España.
Meira
Si decides alojarte en la capital, tomaremos como punto de partida Meira, que se encuentra a media hora aproximadamente de Lugo. Se trata de una encantadora localidad que tiene su origen en el impresionante monasterio del que hoy solamente podemos ver el claustro y la iglesia y que destaca por su preciosa fachada y por su rosetón. El plato estrella de la localidad es el lacón con grelos. Y es que el lacón es uno de los productos de mayor tradición de toda la provincia.
A Pastoriza
Dejando Meira a las espaldas, llegamos a A Pastoriza. Un poco antes de llegar a la localidad, merece la pena hacer una parada en la laguna de Fonmiñá, considerada durante cientos de años como el lugar de nacimiento del río Miño. Sin embargo, las investigaciones han demostrado que su origen de encuentra en un lugar llamado Pedregal de Irimia, muy cerca de la zona.
Mondoñedo
Siguiendo hacia Mondoñedo, podremos disfrutar de paisajes preciosos de montaña. Lo más destacable de la localidad es su precioso casco histórico, en cuya playa fue decapitado en caballero feudal Pedro Álvarez de Sotomayor por orden de los Reyes Católicos.
Abadín
Abadín es una población pequeña pero de gran interés. Por ella pasa el Camino del Norte, unas de las 8 rutas que tienen como destino el Camino de Santiago. Sus parajes son preciosos, con montañas muy bajas y alomadas, lo que permite dar un agradable paseo.
Vilalba
Es lugar de visita obligada para todos aquellos que visiten la provincia de Lugo. Una villa que fue centro de uan comarca regida por linajes nobiliarios que se integraron en los Lemos y que terminaron formando parte del duquesado de Alba. De aquella época todavía hoy se conserva la Torre del homenaje del Castillo de Andrade.
A Feira do Monte
Se trata de la capital del municipio de Cospeito, conocido por su magnífico Pazo de Sistallo y por la laguna de Cospeito, que estuvo a punto de convertirse en una ciudad fantasma y que poco a poco ha ido recuperándose gracias a actividades como la observación de aves. Con lo cual si eres aficionado a la ornitología, no puedes dejar de visitar esta población.
Siguiendo por la LU-111, es interesante hacer una parada en la torre de Caldaloba, uno de los últimos restos del Reino de Galicia, que data del siglo XV. Un fiel reflejo de lo caprichosos que fueron los tiempos medievales en la región.
Bonxe
Bonxe es una de las pocas localidades de Galicia donde se sigue trabajando la alfarería típica como antaño. Una excelente oportunidad de ahondar en las tradiciones de la Galicia más tradicional y de comprar algún recuerdo de este tipo. Además de disfrutar de una buena ración de lacón.
Sarria
Aunque, se encuentra más al sur, reservar un hotel en Sarria también es una buena opción, ya que en esta zona hay mucho por ver. Esta villa fue fundada en el siglo XII por Alfonso IX de Castilla y León, donde fallece en 1230. Durante la alta Edad Media había pertenecido a la familia Trastámara y posteriormente de la de Lemos. Sus atractivos turísticos son múltiples: la casa de Nullan, la casa Centais, la Iglesia de Santa Marina, la torre de Sarria, la Iglesia de San Salvador y el Monasterio de la Magdalena, entre otros.